Hypathia Stephania Rodríguez Cardoso, que trabaja para el periódico El Zócalo de Saltillo en el estado de Coahuila, fue vista por última vez el jueves por la noche con su hijo y varios colegas en una celebración conmemorativa del Día de la Libertad de Expresión, según fuentes informativas mexicanas. Habló por teléfono con colegas poco después de las 2:00 de la madrugada del viernes para informarles de que había llegado bien a casa, pero no acudió a su puesto de trabajo ese mismo día.

Miembros de la familia preocupados por esta ausencia se personaron en el domicilio de Rodríguez Cardoso. Según se informó, encontraron toda la vivienda desordenada; una cámara de la periodista había sido destruida y su automóvil había desaparecido.

El subdirector interino de IPI, Anthony Mills, declaró: “Estamos profundamente preocupados por el bienestar de Stephania Cardoso y de su hijo. Si bien todavía no se conocen los motivos de su desaparición, los periodistas mexicanos, especialmente aquellos encargados de informar sobre el crimen organizado y la actividad policial, han sido objeto de violencia por su trabajo con una frecuencia escalofriante. Las autoridades locales, estatales y federales deben actuar con la máxima urgencia para encontrar a Stephania y a su hijo y garantizar su seguridad”.

Alison Meston, directora de Libertad de Prensa de WAN-IFRA, afirmó: “En una democracia, el Estado tiene el deber de garantizar la seguridad de los profesionales de los medios. Las autoridades tienen que poner fin inmediatamente a la ola de violencia que actualmente cercena el libre flujo de información y la libertad de expresión en México”.

Después de que el sábado la madre de la periodista denunciara oficialmente la desaparición de su hija y su nieto a las autoridades, el gobernador de Coahuila, Rubén Moreira Valdez encargó al fiscal del estado Homero Ramos Gloria que abriera una investigación, según informaron El Zócalo de Saltillo y Proceso. 

La desaparición de Rodríguez Cardoso se produce algo menos de tres semanas después de que Marco Antonio Ávila García, otro reportero de la fuente policíaca, fuera secuestrado, torturado y asesinado en Sonora. Desde el 28 de abril, cinco periodistas han sido asesinados en México, incluida la reconocida periodista de investigación de Proceso Regina Martínez.